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Freebleeding: ¿De qué se trata y por qué es tendencia?

La menstruación libre es un movimiento que busca deshacerse de las restricciones culturales y sociales relacionadas con la menstruación. Esto incluye la eliminación de tabúes y estigmas, así como la promoción de una mayor accesibilidad y aceptación de opciones de productos menstruales, como calzones menstruales. También se promueve una mayor educación y conciencia sobre la menstruación y sus procesos relacionados en los sistemas educativos y en la sociedad en general.

 

El llamado sangrado libre es una forma empoderadora y positiva de enfrentar la realidad y el estigma social de la menstruación. Es una tendencia que ha ganado visibilidad, gracias a la promoción de una mentalidad más abierta respecto a la menstruación (sobre todo en países occidentales), impulsada por programas de organismos globales como la UNICEF.

 

Entonces, ¿qué es el sangrado libre?

En la práctica, el sangrado libre consiste en vivir la menstruación sin el uso de productos menstruales tradicionales o intrusivos para recoger el fluido menstrual y, en lugar de esto, practicar el control de la evacuación de la menstruación.

 

Sin embargo, el Freebleeding conlleva un cambio de mentalidad: muchas mujeres aún se sienten reprimidas y temerosas frente a la menstruación y a la posibilidad de que sea visible para los demás. Esta función fisiológica normal sigue estando rodeada de silencio, tabúes y estigma. En contraste, el sangrado libre se refiere a la idea de permitir que las personas que menstrúan sangren libremente y sin tener que esconder la sangre o sentirse avergonzadas.

 

La tendencia del sangrado libre se basa en varias razones:

  1. Empoderamiento: permite a las personas que menstrúan sentirse cómodas con su cuerpo y proceso natural, sin sentir la necesidad de ocultar o esconder su sangrado.
  2. Sostenibilidad: al no usar productos desechables, se reduce el impacto ambiental.
  3. Accesibilidad: muchas personas pueden tener dificultades para acceder a productos menstruales asequibles y seguros.
  4. Educación: al permitir la visibilidad del sangrado menstrual, se promueve una mayor conciencia y educación sobre la menstruación y sus procesos relacionados.
  5. Salud e higiene: El fluido vaginal habitual y las bacterias saludables se mantienen donde deberían estar: en la vagina. Las prendas reutilizables como los calzones menstruales permiten que la zona transpire y el sangrado fluya naturalmente, evitando problemas potenciales como irritación e intoxicación.

 

Sin embargo, es importante tener en cuenta que el sangrado libre no es adecuado para todas las personas y puede simplemente no ser práctico en algunas situaciones, como en lugares públicos, en el trabajo o en la escuela. Es importante que cada persona decida lo que es mejor para ella y su entorno, y siempre es recomendable consultar con un profesional de la salud antes de tomar decisiones importantes sobre su salud.

Fuentes:
UNICEF. Manual sobre salud e higiene menstrual para facilitadoras y facilitadores.

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